Este es uno de los problemas del hogar más habituales, que aparentemente es sencillo de resolver, pero es necesario saber cuál debería ser el procedimiento prototipo para una eliminación óptima de una obstrucción en el sifón:

1. Usar un desatascador

En caso de que la obstrucción no se encuentre demasiado lejos, servirse de la ayuda de un desatascador puede acabar con ella.

El uso de este, comienza creando ventosas unas cuantas veces y cuando se haya obturado el rebosadero, se ejerce presión con la ventosa creada hacia el desagüe con presión y posteriormente se quita con un movimiento ágil.

2. Limpiar el sifón

Si con la ayuda del desatascador no ha sido posible quitar la obstrucción, el siguiente paso será deshacerse de los posibles restos acumulados a través del conducto de evacuación.

Primero, se deberá desenroscar el tapón de este conducto con una varilla metálica o llave y con la ayuda de un recipiente que recoja el agua que caiga.

Después, se requerirá de un alambre en forma de gancho, una percha estirada o un desatascador mini para sifón para introducirlo en el conducto, con movimientos circulares, consiguiendo así recoger todas las sustancias no deseadas.

Al terminar esta tarea, enrosque el tapón que anteriormente había desenroscado.

3. Destapar con limpiadores químicos para desagüe

Una práctica también muy recurrida posterior a las anteriores, es usar un producto desatascador químico que están hechos con soda cáustica, los agentes que contienen lixiviación y ácidos que funcionan para destruir las obstrucciones. Por lo tanto, este proceso debe de utilizarse con extremada cautela, siguiendo los pasos indicados en el envase del producto utilizado.

Después de haber seguido las indicaciones, no olvide de dejar correr abundante agua para enjuagar el producto químico vertido.