Un jardín cuidado y bonito puede darle a nuestro hogar ese toque especial que lo convierta en un hogar agradable para toda la familia. Aunque en todas las épocas del año, no le demos la misma importancia, en verano los niños se divierten jugando en él y el resto de la familia disfruta igualmente de sus ventajas. Sin embargo, para poder disfrutar del jardín en verano, es necesario mantenerlo cuidado el resto del año, sobretodo en lo que se refiere al apartado de fontanería. Hoy te contamos las averías que pueden surgir a lo largo del año en tu jardín.

Fallo en los riegos

Las plantas son las que le dan a tu jardín ese toque especial y es importante mantenerlas y cuidarlas adecuadamente. El sistema de riego por goteo suele ser la mejor opción a la hora de regarlas diariamente además de un sistema mucho más eficiente que los riegos por inundación y aspersión. Sin embargo este también puede estropearse.

El mayor indicador de que algo no va como debiera serán tus plantas: una apariencia pálida de estas puede indicarte que el sistema no les está transmitiendo todo el agua que necesitan. Es muy probable que a lo largo de todo el año puedan aparecer grietas o roturas que dejen escapar el agua, impidiendo que esta llegue a sus plantas. Deberá buscar la grieta siguiendo el sistema y una vez encontrada repararla con un poco de cinta de soldadura eléctrica que impedirá que el agua siga escapando. También pueden aparecer obturaciones de partículas de arena o de todo tipo. Ante este problema será necesario limpiar las tuberías con agua o aire a presión.

También será necesario de vez en cuando limpiar el filtro que protege el sistema de la cal. Esta es una acción muy sencilla que se realiza tan solo desenroscando una pieza.

El frío en tu jardín

El frío y la congelación pueden ser uno de los quebraderos de cabeza más comunes de tu jardín si vives en zonas de bajas temperaturas en invierno. Para evitar que las tuberías expuestas se fragmenten por el hielo deberemos proceder a descongelarlas tan rápido como podamos. Para ello bastaría con cerrar la llave de paso y abrir un grifo cercano a la zona helada. También te puede ayudar un secador de pelo.

Atascos

Otras averías que pueden afectar a tu jardín son aquellas que pueden producirse con las lluvias y el mal tiempo, y que pueden llevar suciedad y atascos a desagües o sumideros. Para solucionar esto deberemos, primero retirar las hojas o la suciedad atascada levantando la tapa. Después deberemos, con una manguera intentar arrastrar la suciedad con la presión del agua. Si disponemos de un desatascador mecánico podría facilitarnos mucho el trabajo.

Recuerda que ante un problema mayor, siempre será aconsejable pedir ayuda a un profesional. En caso de que puedas solucionarlo y necesites cualquier material, en nuestra tienda online de accesorios de fontanería encontrarás los mejores accesorios para terraza y jardín.