Un inodoro puede durar toda la vida, pero es una de las primeras cosas que se cambian cuando se hace una reforma del baño.
Cambiar un inodoro es una forma sencilla de renovar tu cuarto de baño y darle un aire nuevo a la estancia en tan solo 4 pasos.

Tomar medidas

Antes de escoger el inodoro nuevo, es importante que mida la distancia entre la pared situada detrás y los tornillos laterales. Esta operación da la medida exacta del eje de desagüe en el suelo.
Se deben considerar 3 cosas fundamentales:

1. Que el inodoro nuevo se adapte al lugar del anterior.
2. Es muy recomendable que tenga el mismo eje o al menos un eje ligeramente mayor.
3. Debe haber una distancia de 25 cm entre el muro y el eje del desagüe.

Desmontar el inodoro antiguo.

Desmontar el inodoro antiguo es algo sencillo.
Primero corta el suministro de agua del inodoro, cerrando la llave de paso del agua. A continuación, saca los tornillos de ajuste de la base del inodoro y despega la junta de cera.
Por último, tapa el orificio del desagüe para evitar que pueda caer material o suciedad.

Preparar la superficie para el nuevo inodoro.

Antes de colocar el nuevo inodoro, deberá preparar la superficie en la que se colocará.
Para ello, tienes que marcar el lugar en el que se colocarán los nuevos tornillos y pernos. En el caso en el que no coincidan, tapa los huecos anteriores con cemento y realiza perforaciones nuevas.
Finalmente, limpia la superficie y destape el orificio del desagüe.

Colocar el nuevo inodoro.

Deberá colocar el inodoro en su lugar conectando el manguetón del desagüe. Fijarla al suelo apretando los tornillos de manera alternativa para que la presión se distribuya uniformemente. Compruebe su nivelación, si todo está bien, sella la base con silicona.
Por último, se debe fijar el inodoro definitivamente con los tarugos y tornillos adecuados en los huecos que hemos realizado anteriormente.